Texto: Frank Joe Solano

Fotografía: Bruno Tamborero

Este Viernes pasado día 6 de Octubre tuve la oportunidad de asistir al evento que pasaba por Barcelona la marca Jägermeister, el “Jägermusic Tour 2017”, en el que tuve una experiencia muy satisfactoria ya que pude ver a tres bandas de diferentes estilos, tres bandas que destacaban en su género, con influencias pero destacando su toque más personal, ya sea en actitud como en performance.

Empezamos la noche con uno de los géneros más recordados en este país, el pop de nueva ola, con el grupo La Plata, una banda valenciana que ha sabido encontrar el toque perfecto entre punk y Nueva Ola, con un toque auténtico que hace que cada canción sea un verdadero hit. Un grupo más conocido por su tema, el cual considero uno de los más cañeros del año actual, “Un Atasco”, pero que completa su EP, Un Atasco con un par de hits más como La Luz y Esta Ciudad. En conjunto consideramos este grupo uno con mucho nervio punk, lleno de espléndidos coros y ese sonido de guitarras aceleradas que no paran de sonar acompañadas de una batería que podría tocar toda la vida si hace falta.

El público estuvo entregado en todo momento, conocieran o no al grupo, y la actuación del grupo nos dejo la sensación de cómo si ya fuésemos fans nada más oír su primer estribillo, sabiendo cautivar bien al público con un feedback muy positivo y unas ganas de seguir tocando hasta que salga el sol. La performance nos enseñó como de bien saben hacer viajar en el tiempo al público, llevándonos al pop de finales de los ochenta y principios de los noventa, creando un desenfreno tanto lírica como rítmicamente, acompañado de un teclado que nos hizo pensar si cada grupo debía tenerlo, ya que no paso desapercibido en ningún momento y es que en esta agrupación formada por cinco integrantes sabe como destacar cada uno de sus instrumentos de manera que no sepamos clasificar muy bien lo que estamos escuchando pero que si sepamos que nos encanta. En conclusión, La Plata supo como abrir este tour de una manera bestial, empezando la primera canción como si fuera la última que tocaban.

Pasando al segundo grupo, nos vamos a un género totalmente diferente, la escena Indie más realista del sur Londres gracias al grupo Goat Girl. A pesar de que este grupo femenino londinense, formado por cuatro integrantes, sea prácticamente nuevo, no tiene nada que envidiar a otros grupos con más experiencia, han sabido adaptarse a la escena que actualmente vive el Indie poniendo su grano de arena con un gran peso gracias a su sonido característico, con una actitud innovadora y una performance más que intachable. Nos presentaron sus singles más conocidos además de temas inéditos que gran parte del público no conocía, ya que si buscamos en la red no encontramos una amplia lista de canciones, pero lo poco que conocíamos de ellas, nos dejo más que satisfechos para no parar de cantar durante su set. Un set que duro alrededor de 45 minutos, empezaron con aquellas canciones menos conocidas, pero muy potentes, como por ejemplo Creep o Man, empezando la siguiente canción casi al momento en el que acababan la anterior, un no parar que fue digno de ver junto con una batería que amenizaba perfectamente el sonido de la guitarra rítmica y el bajo a la vez que hacía destacar la voz de la cantante principal. El público conocía el género Indie, pero no se esperaban un Indie con el que pudiesen llegar a saltar a ritmo del sonido, y es lo que paso gracias a Goat Girl, caracterizando su género con su toque duro, directo y cañero. El público no necesito más que una canción para estar encantados con este cambio de género después del primero grupo, con una aceptación positiva, Goat Girl va a través de su performance con un sentimiento que a día de hoy se agradece, se nota que sienten lo que hacen y disfrutan haciendo disfrutar y así es como acabo su set, haciendo disfrutar al público con los tres singles más conocidos hasta la fecha Crow Cries, Scum y Country Sleaze, respectivamente.

No podríamos haber tenido mejor grupo para terminar la noche que la banda de punk FAVX, si los ánimos del público estaban de 10/10, FAVX hizo que pasaran al 100/10. Hablando un poco sobre el grupo, vimos claras influencias de grupos como Dope Body o Car Seat Headrest por ejemplo, un grupo que ha sabido coger influencias de dos épocas diferentes, como lo son la actual y los 90′, y hacer un punk que no solemos ver en la actual escena del país, algo que se agradece porque sinceramente, echábamos de menos despertarnos sin voz a la mañana siguiente de un conciertazo como el que nos brindaron nuestros amigos, con unas letras muy realistas con las que empatizamos a más no poder, una lírica que comprende las cosas que llegamos a sentir diariamente y aquellas cosas que vivimos una vez salimos a la calle.

El grupo nos presentó una variedad de canciones entre los que encontramos temas de sus dos singles, los cuales tienen dos canciones individualmente, en los que encontramos el sonido más punk de la escena actual y no pudimos evitar liarla, no paso más de dos canciones hasta que el público empezó a hacer crowdsurfing o hasta abrir un cercle pit, fue como estar de vuelta en los 90′ pero sin olvidarnos de las influencias actuales, el toque perfecto para una actuación que podemos caracterizar como “explosiva”.

El público estuvo entregado de principio a fin y hasta después del concierto aún se comentaba la actuación del grupo, una performance que nos dejaba directos de las canciones que mejor conocíamos como Fire King, Born In The 90’s y Flowers of the West, respectivamente. Individualmente el grupo nos fascino, empezando por el batería, Nicolás, al que no podemos recordar sin mover las manos, pasando por la guitarra y voz principal, Daniel, al que recordamos haciendo literalmente de todo menos estar quieto, con una actitud explosiva de principio a fin y sin parecer cansado en ningún momento, y por último pasamos al bajo, la incorporación más reciente de la banda, Elena, controlando el bajo como Messi controla el balón, llena de una actitud activa al más estilo punk, sintiendo cada nota en cada salto y en cada grito y en conjunto con los demás miembros, formando una unión que hacía mucho tiempo que no veíamos en un grupo nacional. Si tuviésemos que darle un adjetivo a su performance, nos quedaríamos cortos, por eso les damos un 100 sobre 10 de nota ya que a día de hoy aún sentimos las agujetas de ese concierto en el que no pudimos parar de hacer todo.